MI EXPERIENCIA EN CHIAPAS…
Primero que nada, quiero agradecer a JEM, Casa jubileo y Centro cultural Tlaíxpan por invitarme a este gran viaje, y más aún por la beca otorgada para la realización del mismo.
Para mí es una experiencia muy gratificante conocer algo mas de la historia de Chiapas, es cierto que en la escuela nos enseñan una parte y las noticias también, pero la información queda muy corta y a veces distorsionada. Estar allí y conocer la historia por parte de las personas que la vivieron es más enriquecedora, y me permite tener un panorama más amplio de la situación actual que se vive en el estado.
En SiPaz (Servicio Internacional para la Paz) me impresionó mucho saber que existen personas y organizaciones fuera del país dispuestos a colaborar para hacer respetar los derechos humanos, que dan acompañamiento en los procesos jurídicos y políticos a las diferentes agrupaciones que existen en las comunidades de Chiapas. Estos observadores, son muy queridos y solicitados por las organizaciones indígenas, ya que les han dado la seguridad y confianza que el gobierno mexicano perdió hace mucho tiempo.
El centro de derechos humanos Fray Bartolomé de las Casas, A.C. fundado por el obispo Samuel Ruíz García en 1989 fue otro gran paso en la defensa y promoción de los derechos humanos en comunidades indígenas y campesinas tanto para agrupaciones como personas físicas. Me gustó mucho este centro debido a que proporcionan herramientas jurídicas y les dan acompañamiento en todos los procesos, así las personas no se sienten solas. También porque trabajan sobre la memoria histórica, es decir, al no olvidar lo pasado están conscientes de su realidad y pueden tomar mejores decisiones.
CIDECI (Centro Indígena de Capacitación Integral) llamado también Universidad de la Tierra es digno de admirar, fundada en 1989 para enseñar oficios a jóvenes mexicano y extranjeros con la idea de que, una vez aprendido regresen a sus comunidades a ejercer su trabajo, por lo tanto no es necesario una boleta de calificaciones o un título que abale su estudio, lo único que realmente cuenta es practicar hasta aprender; los cursos se imparten en español y tzotzil, los mas avanzados enseñan a los de nuevo ingreso. Este espacio es como una ventana a las comunidades zapatistas autónomas, ya que todo lo producido es para uso de la misma universidad, es como un ciclo donde todos ocupan lo de todos.
En Simojovel conocimos al padre Marcelo, una persona digna de admirar, que no se ha limitado a ejercer sus funciones como muchos sacerdotes, él ha buscado a su pueblo, sin importar su religión e ideología, con la visión de conocer las necesidades de la comunidad, encontrando mucha violencia, drogadicción, alcoholismo, autoridades corruptas, entre otras cosas. Una vez analizado su entorno, ha invitado a las personas a perder el miedo, y ha puesto el ejemplo al denunciar públicamente las injusticias. No le importa que lo acusen de guerrillero, él tiene fe en Dios y lucha por un mundo de paz.
La visita de Acteal fue muy fuerte para mí, enterarme de lo ocurrido el 22 de diciembre de 1997, donde murieron muchos inocentes, personas que solo estaban en ayuno y oración por la paz. Esto solo refleja lo que es capaz de hacerse por mantener los intereses políticos de unos cuantos, sin importar el dolor de las personas. Pero la comunidad de las abejas sigue honrándolos, para no olvidarlos y seguir en la lucha de hacer respetar sus derechos.
Así mismo, conocer a Estela, fue impresionante, una mujer guerrera que, sin aparentemente nada, pudo lograr lo que nadie imaginaría, todo por el amor a sus familiares (presos políticos por la matanza de Acteal); aquí mismo se comprueba el refrán que dice: “querer es poder”. Ahora su misión tiene un giro de 360°, tiene un ángel que le pide ser todavía mas fuerte, sin embargo, para ella no hay imposibles.
También tuvimos la oportunidad de conocer un Colectivo de mujeres que tienen un proyecto agroecológico para la producción de café y cacao, pretenden contribuir al desarrollo de la comunidad rescatando la relación hombre-tierra; para lograr productos de excelente calidad en armonía con la naturaleza. Mismos que al ser orgánicos, son bien pagados.
Por último, platicamos con otra agrupación llamada Kol-Lek-Tivo Snajtaleltik (la casa común de nuestro devenir) conformado por hombres y mujeres que buscan alternativas para una vida mas justa y digna, mas amigable con la naturaleza, pues nosotros dependemos de ella, y por lo tanto debemos cuidarla.
En conclusión, estar en Chiapas me permitió conocer otras realidades, reafirmar que sí se pueden hacer grandes cosas cuando la gente se une y trabaja en equipo, dejando a un lado las diferencias, respetando las ideologías; todos somos hermanos y necesitamos unos de otros. Claro, sin descuidar la relación con nuestra madre tierra, pues sin ella no somos nada.
Esto me motiva a seguir trabajando en el pueblo, aportar mi granito de arena en la toma de conciencia y sensibilización de los problemas que enfrentamos, y así, juntos podamos buscar las soluciones. Yo espero, no sea necesario sufrir tanta violencia para reaccionar a nuestra realidad. Ya no se trata de solo saber, es momento de actuar!!!!!